Los caninos son piezas fundamentales para las funciones de nuestra boca. Normalmente erupcionan hasta los 13 años, pero hay ocasiones en que no lo hacen, y se quedan dentro de la encía o en el paladar. Fenestración de caninos incluidos.
Cuando los caninos no son capaces de erupcionar, recurrimos a la fenestración de caninos incluidos, que consiste en realizar una pequeña ventana en la encía para eliminar la mucosa y el hueso alrededor del diente, con el fin de liberarlo. Una vez visualicemos la corona, podremos utilizar botones u otras técnicas para colocarlo en su posición correcta dentro de la arcada.
La intervención es indolora para el paciente y se realiza con anestesia local, con dos tres días de postoperatorio.
